Si alguno de ustedes tuvo la oportunidad de andar por Chepe Centro la noche del pasado 19 de abril después de las 8 de la noche, como dicen por ahí, probablemente "la vio fea".
Total nunca se supo de quién fue la culpa, si del transformador que voló en mil pedazos, o de los ovnis, o fue un complot, o la Madre Teresa. Y poco importa ya, si al mejor estilo tico, la mayoría ni se acuerda, pero este peatón si lo tiene bien presente.
Imaginen mis estimados lectores, que el centro de Chepe ya tiene zonas "peatonalmente inseguras" en las noches debido a que la falta de iluminación es cómplice perfecta de los hampones (aunque la palabra les queda grande) para cometer toda clase de fechorías contra algún(a) despistado(a) que se le ocurra la brillante idea de pasar caminando por "sus dominios". Ahora tome esta zona oscura, y extiéndala por toda la ciudad gracias al bello apagón nacional, y obtendrá la mezcla perfecta de presa, falta de semáforos, paradas de buses abarrotadas, gente tirándose a media calle, esquinas repletas de gente que pretendía (en sus sueños) conseguir un taxi, y desde luego, los asaltantes y carteristas que no desaprovecharon la oportunidad para hacer su agosto en pleno abril.
Debo admitir que las cuatro cuadras que tuve que caminar esa noche por la avenida segunda no fueron para nada placenteras. Todo lo contrario. Y debo admitir también que topé con la suerte de que mi parada de buses estaba cerca. No quiero imaginar las congojas que pasaron los pobres peatones que tuvieron que ir a buscar su autobús a los alrededores de la plaza de las Garantías Sociales, Parque Central, La Merced, paradas de Tibás, Alajuelita y otras similares.
Mi solidaridad con los que no corrieron con la misma buena suerte que yo.
¿Alguien más la vio fea esa noche? Espero sus comentarios.
Total nunca se supo de quién fue la culpa, si del transformador que voló en mil pedazos, o de los ovnis, o fue un complot, o la Madre Teresa. Y poco importa ya, si al mejor estilo tico, la mayoría ni se acuerda, pero este peatón si lo tiene bien presente.
Imaginen mis estimados lectores, que el centro de Chepe ya tiene zonas "peatonalmente inseguras" en las noches debido a que la falta de iluminación es cómplice perfecta de los hampones (aunque la palabra les queda grande) para cometer toda clase de fechorías contra algún(a) despistado(a) que se le ocurra la brillante idea de pasar caminando por "sus dominios". Ahora tome esta zona oscura, y extiéndala por toda la ciudad gracias al bello apagón nacional, y obtendrá la mezcla perfecta de presa, falta de semáforos, paradas de buses abarrotadas, gente tirándose a media calle, esquinas repletas de gente que pretendía (en sus sueños) conseguir un taxi, y desde luego, los asaltantes y carteristas que no desaprovecharon la oportunidad para hacer su agosto en pleno abril.
Debo admitir que las cuatro cuadras que tuve que caminar esa noche por la avenida segunda no fueron para nada placenteras. Todo lo contrario. Y debo admitir también que topé con la suerte de que mi parada de buses estaba cerca. No quiero imaginar las congojas que pasaron los pobres peatones que tuvieron que ir a buscar su autobús a los alrededores de la plaza de las Garantías Sociales, Parque Central, La Merced, paradas de Tibás, Alajuelita y otras similares.
Mi solidaridad con los que no corrieron con la misma buena suerte que yo.
¿Alguien más la vio fea esa noche? Espero sus comentarios.